Este año 2013, y con el tema central de “Incidencia de la situación del Sahel en el Mediterráneo”, los días 12, 13 y 14 de noviembre, entre las 18:30 y las 21:00 horas se disertarán y debatirán diversas ponencias. El primer día en el salón de actos de Unicaja, de la Acera de la Marina; el segundo en el auditorio del Museo Carmen Thyssen y el tercero en el salón de la Rosa de los Vientos del Real Club Mediterráneo, donde a continuación de la jornada, se procederá a la clausura con una cena, servida en el restaurante del Club, abonando todos los comensales la cantidad de 20 euros.
África y principalmente el Sahel se han convertido en un campo de actuación inmediata de la Unión Europea y de otras potencias, porque como decía el anterior presidente de la Unión Africana, a mitad de la primera década del presente siglo “no hay barrera ni muro que pueda detener a 1.500 millones de africanos que no disponen ni de un euro diario para comer” y expresaba que los primeros que sentirían sus efectos serían los europeos.
Cuando así hablaba, no era preocupante la situación terrorista en el Sahel, pero hoy, en 2013, lo grupos AQMI, MUYAO, MNLA, Movimiento Ansar Dine, Boko Haram y Al-Shabad, todos de carácter islamista salafista, menos el MNLA, que es nacionalista, campean a sus anchas por todos los países del Sahel, desde el Atlántico al Índico, adentrándose en los países del Magreb por el norte y del África Ecuatorial, por el sur.
Todos llevan la marca de Al Qaeda y todos han declarado la “guerra” a los países occidentales, principalmente cristianos (judíos incluidos) y a los llamados países islámicos “apóstatas”.
Los últimos atentados en Nairobi y Nigeria, han producido varios cientos de muertos y heridos, integrando los grupos actuantes, algunos jóvenes procedentes de la primera generación islámica que vive en Europa.
Precisamente como ponentes, intervendrán el día 14, para tratar, entre otros asuntos, el del terrorismo, el Cónsul General de España en Jerusalén, y el Embajador Especial de España para los países del Sahel, dos diplomáticos españoles, grandes expertos en temas del Mediterráneo.
África es un continente de gran futuro. Las inyecciones educativas, científicas, tecnológicas y económicas, se multiplican por cien y aún podrían tener mayores efectos si la lacra de la corrupción no se hubiera incrustado en múltiples gobiernos. África lucha no solo por sobrevivir, sino por superar de forma exponencial su retraso. Por ejemplo la falta de infraestructuras, dificultan la comunicación, produciéndose con tal motivo un importante auge en las telecomunicaciones inalámbricas y los recursos a través de internet.
África es un territorio de grandes posibilidades, pero también el emprendedor que quiera hacer negocio allí, tiene que disponer de unos conocimientos suficientes sobre la idiosincrasia de cada uno de los países que la componen.
Todo este aspecto económico, incluido el tema de la “seguridad o inseguridad jurídica”, será abordado el día 12 de noviembre, coordinado el conjunto por el equipo de la dirección técnica de Unicaja.
La guerra civil en Siria, el golpe de estado en Egipto, la inestabilidad política en Libia, la problemática existente en Túnez, Argelia y Marruecos y la inseguridad de los países de la “frontera” (Sahel), serán temas que se tendrán en cuenta el día 13 de noviembre, mediante análisis geopolíticos desde distintos puntos de vista, como el técnico de un profesional del Instituto Español de Estudios Estratégicos, el embajador de Israel en el Reino de España y el de otro embajador de un país árabe del Magreb.
Tras las Jornadas y perfectamente recogido en las actas que el Servicio de Publicaciones del Universidad de Málaga, publicará a continuación, se dispondrá de una radiografía de la situación en la zona, actualizándose año tras año, según los acontecimientos que acaecen.
El Foro para la Paz en el Mediterráneo está formado por el Ayuntamiento, Universidad y Cámara de Comercio de Málaga; UNICAJA, la Asociación Española de Capitanes de Yate para la Reserva Civil (AECYR), el Real Club Mediterráneo y www.belt.es , habiendo todos ellos apostados por lanzar mensajes adecuados, desde la “sociedad civil” en aras de una mayor comprensión y entendimiento entre los países ribereños del Mediterráneo, ampliándose tras estas Jornadas a los que también quedan afectados por la decisiones que se toman en este mar milenario.